lunes, 21 de octubre de 2013

Fin de semana de desconexion en Morella

Este fin de semana la casi ya madre, y yo mismo, nos hemos ido de fin de semana de des conexión a Morella, lo que se traduce en caminatas, buen comer y bueno, el beber mas flojo, por aquello de solidarizarse con la mama embarazada.

Si no conocéis Morella, os recomiendo que al menos le echéis un vistazo, ya que es una ciudad que aun mantiene sus murallas y calles medievales, y sobre todo el castillo que culmina la montaña en la que esta enclavada.

Morella
Panorámica de Morella

Lógicamente, todo la ciudad esta llena de calles con subidas y bajadas, con lo que la futura mami, que lleva ya una niña de 7 meses en su interior, pues claro, tenia que ir a un ritmo menor del que habitualmente tiene, aunque lo soporto como un campeona.

Mención aparte merecen los padres con los que nos cruzábamos, ya que ahora te fijas y mucho. Ver a esos padres, con calles con una pendiente que haría bajar a mas de uno de la bicicleta en el Tour de Francia, arrastrando el carrito por esas calles empedradas, me hizo sacar una exclamación:

- Aquí no venimos con la niña hasta que cumpla 10 años (o los carritos vayan con motor, tracción a las 4 ruedas y elevalunas eléctricos)

Porque ver esa posición imposible a la hora de transportar a sus vástagos, me impresionó.

Uno de los productos típicos de Morella, es la manta morellana, la cual es muy utilizada como indumentaria fallera. Debido a que este año, la Fallera Mayor de Valencia, Carmen Sancho, es fallera de nuestra falla, implica que el dia de la ofrenda saldremos en ultimo lugar, por lo que me he comprado esta manta para resguardar del frío a María, que desfilara a mis brazos (aprendiendo tradiciones desde muy pronta edad, si).


Manta morellana
Manta morellana
Durante 36 años he evitado llevar este tipo de prendas, pero por María, lo que haga falta (hay que ver que pronto se les quiere, leches!!!)

Pero la mejor situación fue el domingo, y es que estábamos en una terraza tomando yo una cerveza y ella su habitual zumo, y de repente oímos a la vez, un perro ladrar y un niño llorar.

Yo vi pasar mi futuro mas cercano (ya que tenemos una perra, y la niña de camino) y desde el alma me salio:

- Cariño, este es nuestro futuro; llantos, ladridos y mucho cambio de pañales...

Pero la verdad, que ganas tenemos de que llegue ese futuro!!!!




2 comentarios:

  1. Me encanta Morella. La verdad es que el interior de Castellón es una pasada (no lo digo porque yo sea de aquí... bueno, sí, por eso lo digo, jajaja) Los papás que iban en carrito serian forasteros porque tengo entendido que los morellanos no lo utilizan mucho por razones obvias :)

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  2. Hombre, pues somos vecinos, ya que yo soy de Valencia. Nosotros si vimos algun morellano con carrito, es mas incluso con tacones alguna morellana,,, y a nosotros nos costaba caminar con deportivas (es lo que tiene ser de superfiicies planas) pero ya te digo que yo por mi parte, dudo que visite morella empujando carrito.. a no ser que compremos la opcion arnes con el carrito y lo pueda empujar un burro (animal de 4 patas, eh!?). Por cierto, muy fan del interior de castellon ;) Un abrazo!!!

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